La Estrategia de Ventas
Si definimos a la estrategia como la técnica o conjunto de actividades destinadas a conseguir un objetivo, entonces la estrategia de ventas son aquellas ideas y procedimientos que lleva a cabo el arte y la ciencia de vender.
Lo primero que debemos de hacer en definir la estrategia es tomarlas muy en serio, es decir, para aumentar las ventas e ingresos y tener éxito debemos de ser inmaculadamente profesionales, no dejar nada al azar o a la improvisación. Los mercados están ferozmente competidos por lo que el diseño de una planificación estratégica de ventas es fundamental para triunfar.
La mejor manera de planear tu estrategia de ventas es diciendo no a todo aquello que te desvía de la vocación de vender; di SI a las actividades del proceso de ventas, a la prospección en la búsqueda de mercado, a la automatización de etapas en las ventas, a cambiar de enfoque de ventas a algo más consultivo, a la formación y desarrollo de expertos en ventas, a competir buscando diferenciadores, a definir conceptos, a innovar, a medir, a tomar decisiones, a dar un puntual seguimiento, a confirmar las negociaciones y al servicio postventa, entre otros tantos temas.
Una cualidad que debemos de tener para nuestro éxito es tener sentido de urgencia, no postergar más decisiones pendientes a soluciones inminentes, no dejar a la demora o al mañana las asimilaciones pendientes que nos rezagan, nos confunden y nos tienen a merced de las circunstancias. Algo que funciona de maravillas es fijar fechas y establecer plazos límites no negociables a esto se llama esto la fuerza de la calendarización, los tiempos de globalización nos obligan a ser determinados, a tomar riesgos y a no ser timoratos.
Debes de acelerar tus decisiones a lo que se conoce el poder competitivo de la velocidad, las decisiones de trascendencia y de largo plazo, piénsalas, las de corto plazo y de resultados inmediatos, tómalas ¡Ya!
Reclama tu posición de liderazgo, el mercado está esperando al experto, al que sabe, a quien confiar y con quien aliarse; competimos con nuestra gente, se compite con el personal de la organización, existe una relación directa entre el concepto de uno mismo, el clima organizacional, la auto imagen del personal y su rendimiento.
Son tres los elementos del profesional, el primero son los conocimientos, pero de nada sirven sin los segundos, los sistemas, y todo esto sin motivación, como tercero no se avanza, es por ello, que el crecimiento debe de ser armónico y equilibrado. En los mercados actuales ya no se vende, nos compran, las personas están a la defensiva por lo que el elemento confianza es fundamental para aumentar tu credibilidad.
Todo cuenta, cada día, haciendo siempre lo mejor, perseverando por satisfacer las necesidades de tu cliente potencial, algo que queda muy claro es que siempre podemos hacerlo mejor, fijar tus metas, establecer tus planes de acción y esforzarte rompiendo a diario tus límites; integra en tus estrategias de ventas, la fuerza de la calendarización, el poder competitivo de la velocidad y los factores del profesional y el éxito está garantizado. Fuente original: www.SalesUp.com.mx
Lo primero que debemos de hacer en definir la estrategia es tomarlas muy en serio, es decir, para aumentar las ventas e ingresos y tener éxito debemos de ser inmaculadamente profesionales, no dejar nada al azar o a la improvisación. Los mercados están ferozmente competidos por lo que el diseño de una planificación estratégica de ventas es fundamental para triunfar.
La mejor manera de planear tu estrategia de ventas es diciendo no a todo aquello que te desvía de la vocación de vender; di SI a las actividades del proceso de ventas, a la prospección en la búsqueda de mercado, a la automatización de etapas en las ventas, a cambiar de enfoque de ventas a algo más consultivo, a la formación y desarrollo de expertos en ventas, a competir buscando diferenciadores, a definir conceptos, a innovar, a medir, a tomar decisiones, a dar un puntual seguimiento, a confirmar las negociaciones y al servicio postventa, entre otros tantos temas.
Una cualidad que debemos de tener para nuestro éxito es tener sentido de urgencia, no postergar más decisiones pendientes a soluciones inminentes, no dejar a la demora o al mañana las asimilaciones pendientes que nos rezagan, nos confunden y nos tienen a merced de las circunstancias. Algo que funciona de maravillas es fijar fechas y establecer plazos límites no negociables a esto se llama esto la fuerza de la calendarización, los tiempos de globalización nos obligan a ser determinados, a tomar riesgos y a no ser timoratos.

Reclama tu posición de liderazgo, el mercado está esperando al experto, al que sabe, a quien confiar y con quien aliarse; competimos con nuestra gente, se compite con el personal de la organización, existe una relación directa entre el concepto de uno mismo, el clima organizacional, la auto imagen del personal y su rendimiento.
Son tres los elementos del profesional, el primero son los conocimientos, pero de nada sirven sin los segundos, los sistemas, y todo esto sin motivación, como tercero no se avanza, es por ello, que el crecimiento debe de ser armónico y equilibrado. En los mercados actuales ya no se vende, nos compran, las personas están a la defensiva por lo que el elemento confianza es fundamental para aumentar tu credibilidad.
Todo cuenta, cada día, haciendo siempre lo mejor, perseverando por satisfacer las necesidades de tu cliente potencial, algo que queda muy claro es que siempre podemos hacerlo mejor, fijar tus metas, establecer tus planes de acción y esforzarte rompiendo a diario tus límites; integra en tus estrategias de ventas, la fuerza de la calendarización, el poder competitivo de la velocidad y los factores del profesional y el éxito está garantizado. Fuente original: www.SalesUp.com.mx